El 21 de febrero tuve una cirugía, nada serio.
Un asunto que tocaba solucionar y nada más. No me pregunten que fue porque no
les voy a contar pero ese pequeño incidente me obligó a tomar antibiótico por
10 días y a cambiar de dieta. Todo lo que como o bebo es susceptible de hacerme
daño, pero ese no es el problema, el problema es que con eso viene un malestar
y un dolor insoportable. Por eso, y tal vez por otras razones más no he
consumido alcohol desde esa época y ahora, mientras más días pasan empiezo a contemplar
la idea de no consumir alcohol del todo.
Tal vez llegue a perecer una medida drástica
porque el alcohol no me ha hecho nada, pero si es un hecho que desde la cirugía
no he amanecido ningún día con guayabo y he perdido tres kilos. Antes estaba en
81 y ahora estoy en 79. Eso me parece una razón válida para no alentar el
consumo de alcohol.
Aparte de las razones físicas, que son
aparentes, estoy intentando buscar más razones para no volver a beber, pero
cuando me pregunto eso también me pregunto ¿tengo razones para beber? ¿hay
alguna idea razonable que me impulse a consumir una cerveza o dos o tres o a
beber cócteles o tomar ron como lo hacía antes?